En la línea de mi cruzada por un uso racional y respetuoso de los dispositivos móviles de alta conectividad he encontrado este clarificador spot. En él se nos hace evidente el desprecio y el ninguneo (me encanta esta palabra) a los demás que supone el estar conectado en situaciones sociales que requieren un contacto directo, cálido, comunicativo y siempre enriquecedor.
Respecto al eslogan del final (y para los que no sepáis tailandés) recordad que siempre es bueno tener esa zona oscura para rellenar con nuestras propias conclusiones. Os animo a ello.
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